Con la mano ligera de un fallo judicial en Alemania, la
policía puede basarse en criterios tales
como el color de piel para elegir a los transeúntes para pedirles que exhiban
su documentación.
Ese fallo fue emitido después de que un alemán negro
demandara a los policías que intentaron controlarlo en un tren. El pasajero se
negó a mostrar su documentación, los agentes le registraron su mochila y al no
encontrar nada, lo llevaron a una comisaría donde se produjo una fuerte
discusión.
El hombre fue acusado por injurias y durante el proceso un
policía explicó que controlaba a los pasajeros que tuviesen aspecto de
extranjeros. El afectado presentó una demanda en la Corte y los jueces dieron la
razón a la policía.
"Básicamente es racismo", afirmó Tahrir Della, de la Iniciativa Negros
en Alemania (ISD), quien denunció el hostigamiento desproporcionado a las
personas de color por parte de la policía. "Las autoridades siempre
dijeron que la policía no aplica el llamado perfil racial. Al aprobar
oficialmente esta práctica, abren las puertas para más", agregó.
La iniciativa, que generó las críticas de
organismos antidiscriminatorios, reavivó -según expertos- los fantasmas
racistas que parecían haber desaparecido en Alemania.
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